Llega la temporada de frío, viento y nubes. Una época en la que el sol y sus efectos secundarios los dejamos olvidados a un lado y dedicamos nuestro tiempo a prevenir enfermedades más frecuentes de la temporada invernal como son la gripe, faringitis, etc.
No somos conscientes que en los meses más fríos del año, el sol está situado más bajo en el horizonte y con un ángulo diferente, ello incrementa nuestra exposición a la radiación ultravioleta..